Por: El Dueño del Rancho
240723
*
Este lunes se conformó oficialmente el nuevo Congreso del Estado de Guanajuato y pareciera que la dinámica sí va a ser diferente… porque ya se repartió el pastel.
Al perder la mayoría, el PAN ahora está obligado a generar alianzas con otras fuerzas políticas para lograr sus cometidos, porque para aprobar alguna iniciativa le faltan 2 votos y para los cambios de “gran calado” hoy más que nunca está lejos de pasar la aplanadora, ya que necesita al menos 7 aliados.
Esto supone un escenario áspero para Acción Nacional, pero la lectura ciudadana es favorable, ya que las decisiones para agregar, quitar o modificar leyes ahora contarán con la óptica de más actores, donde la oposición se hará valer.
Cambios, como el nombramiento del sustituto de Carlos Zamarripa al frente de la Fiscalía Estatal o aprobar deuda pública para los Municipios, ya no serán en automático sino que tendrán que “cabildearse” y eso debería ser favorable para efectos democráticos… aunque no se nos olvide que estamos hablando de diputados, quienes son las figuras públicas más asociadas al concepto de la corrupción.
Desde el IEEG, Luis Ernesto Barbosa expresó el gozo de Morena tras la designación de “pluris” donde este partido político (aunque no se quieran llamar como tal) obtuvo 5 curules. Esto les significa un triunfo electoral histórico, ya que ahora son visibles, serán escuchados y forzosamente tomados en cuenta. «Se acabó la simulación», leyó ante los consejeros electorales. Ya en sus términos optimistas, los morenistas consideran que es la puerta para que la 4T llegue a Guanajuato en el 2027 y se consolide en el 30.
En esta repartición, el PAN obtuvo 4 y esto, lejos de festejarse al interior del blanquiazul, manifestó que el partido oficial ya no tiene la fuerza de antaño y la ley electoral le proporciona “refuerzos” para tener la representación partidista que no ciudadana.
En el recuento, el PRI también obtuvo “de lo perdido, lo encontrado”, al lograr 3 representaciones finales, lo que permitió que Ruth Tiscareño se colara de última hora.
Al Partido Verde también le alcanzó para que su dirigente estatal, Sergio Contreras, ocupara una curul para la próxima legislatura.
Respecto al PT, le corresponden 2 escaños y aquí está por definirse si el sanmiguelense Luis Ferro se vuelve “cola de león o cabeza de ratón”, ya que una opción es mantenerse en Morena o ser coordinador del petismo guanajuatense.
Además, por primera vez en su historia el Palacio Legislativo guanajuatense tendrá mayoría femenina, ya que llegarán 19 mujeres por solo 17 varones. Esto también es un parteaguas en la política local y se refleja en la visión incluyente que tendrán las iniciativas, reformas y derogaciones de ley. Se logró este objetivo histórico.
Ya con el Congreso Local repartido, en Guanajuato se vislumbra un nuevo escenario político que pudiera obstaculizar a Libia Denisse, pero que pudiera beneficiar a la democracia guanajuatense a partir de la pluralidad de voces y actores políticos.
Ahora sí que, luego de partirlo, como dicen en mi rancho: “queremos pastel”.
***
